GUATEMALA, Guatemala, feb. 7, 2009.- Los cárteles de la droga que promueven los cultivos de amapola en poblaciones de la frontera que Guatemala comparte con México perderán al menos mil millones de dólares como resultado de la destrucción de novecientas hectáreas de estas siembras.
El presidente de Guatemala, Álvaro Colom, quien visitó la zona donde más de quinientos soldados y trescientos agentes de la Policía Nacional Civil trabajaron durante una semana en jornadas de doce horas diarias en áreas montañosas donde la temperatura ambiental registró dos grados bajo cero, anunció un programa especial de asistencia para las familias que subsisten del cultivo de amapola.
Colom aseguró que la destrucción de la planta de donde se extrae la pasta para la elaboración de la heroína ha sido la más importante de los últimos años y manifestó que en las próximas semanas se continuará con los operativos, con los que esperan superar los siete mil millones de matas destruidas, que tienen un costo en el mercado de la droga de tres dólares por cada unidad.
Los operativos se realizaron en poblaciones colindantes con el estado de Chiapas, en los municipios de Ixchiguan y Tajumulco, en el occidental departamento de San Marcos, localizado en una zona altamente montañosa y extensamente alejada de los centros urbanos, donde el clima es el más propicio para la producción de amapola.
El gobierno guatemalteco iniciará en breve, dijo el presidente Colom, el desembolso de alrededor de dos millones de dólares destinados a financiar las siembras de cultivos como papa, legumbres y maíz para que quienes están al margen de la ley trabajando en los cultivos de amapola, puedan reincorporarse a la vida productiva del país.
Según informes confidenciales la semilla de amapola ha sido mejorada en laboratorios que están instalados en territorio mexicano de la zona fronteriza, la que luego es entregada a los campesinos guatemaltecos que devengan salarios mensuales que alcanzan hasta los tres mil dólares.
Guatemala se ha convertido en el mayor productor de amapola en América y en el tercero a nivel mundial, solamente superada por Birmania y Afganistán.
El presidente de Guatemala, Álvaro Colom, quien visitó la zona donde más de quinientos soldados y trescientos agentes de la Policía Nacional Civil trabajaron durante una semana en jornadas de doce horas diarias en áreas montañosas donde la temperatura ambiental registró dos grados bajo cero, anunció un programa especial de asistencia para las familias que subsisten del cultivo de amapola.
Colom aseguró que la destrucción de la planta de donde se extrae la pasta para la elaboración de la heroína ha sido la más importante de los últimos años y manifestó que en las próximas semanas se continuará con los operativos, con los que esperan superar los siete mil millones de matas destruidas, que tienen un costo en el mercado de la droga de tres dólares por cada unidad.
Los operativos se realizaron en poblaciones colindantes con el estado de Chiapas, en los municipios de Ixchiguan y Tajumulco, en el occidental departamento de San Marcos, localizado en una zona altamente montañosa y extensamente alejada de los centros urbanos, donde el clima es el más propicio para la producción de amapola.
El gobierno guatemalteco iniciará en breve, dijo el presidente Colom, el desembolso de alrededor de dos millones de dólares destinados a financiar las siembras de cultivos como papa, legumbres y maíz para que quienes están al margen de la ley trabajando en los cultivos de amapola, puedan reincorporarse a la vida productiva del país.
Según informes confidenciales la semilla de amapola ha sido mejorada en laboratorios que están instalados en territorio mexicano de la zona fronteriza, la que luego es entregada a los campesinos guatemaltecos que devengan salarios mensuales que alcanzan hasta los tres mil dólares.
Guatemala se ha convertido en el mayor productor de amapola en América y en el tercero a nivel mundial, solamente superada por Birmania y Afganistán.
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