EL PUEBLO
Al mismo tiempo, el presidente hondureño Porfirio Lobo anunció la creación de una comisión para revisar la problemática de las cárceles del país, incluyendo los programas de rehabilitación de los reos y la estructura administrativa, capacitación y contratación del personal.
“Hasta este momento no se ha podido determinar que hayan existido actos dolosos encaminados a decir que (el incendio) se produjo como consecuencia de un acto criminal”, dijo Rubí a Canal 5.
Rubí detalló que la hipótesis del reo que quedó dormido mientras fumaba se basa en “numerosas declaraciones de los testigos”, aunque aclaró que “aún no precisamos cuál de los prisioneros (fue)”.
Esta versión, añadió, es respaldada por seis expertos del buró de Bebidas Alcohólicas, Armas de Fuego y Tabaco de Estados Unidos (ATF, por sus siglas en inglés) que investigan el caso y que en un informe preliminar dijeron que el siniestro del 14 de febrero se derivó de una flama proveniente de algún encendedor, cigarrillo, cerillo u otro y descartaron que la causa haya sido un rayo, un problema eléctrico o algún combustible o líquido inflamable.
Aun así, criticaron las medidas de seguridad en el sistema carcelario hondureño, donde se hacinan más de 13 mil reclusos.
“Este trágico suceso ha centrado la atención en las prácticas inadecuadas de seguridad en el sistema penitenciario hondureño, tales como la superpoblación, la presencia de materiales inflamables, la falta de personal en servicio y la falta de un plan de evacuación para los reclusos”, dijo el equipo en un comunicado.
Los más de 500 parientes de las víctimas han presionado al gobierno para aclarar la situación, ante las versiones de que el siniestro pudo ser provocado y de que los guardias del centro penal dispararon contra los reos. En este sentido, Rubí aseguró que ninguna de las más de 200 autopsias practicadas hasta ayer había revelado heridas de bala en las víctimas.
La cifra de muertos aumentó de 359 a 360 con el fallecimiento, ayer mismo, del reo Juan Angel Arias, de 66 años, informó a la AP el médico Manuel Boquín. “Hicimos esfuerzos por salvarlo, pero sólo le prolongamos la vida por unos días más ante las lesiones severas que presentaba”, añadió.
Indultarán a recluso
En tanto, el presidente Porfirio Lobo anunció que concederá el indulto al reo Marco Antonio Bonilla, de 50 años, porque salvó a varios de sus compañeros durante el voraz incendio.
El mandatario instruyó al titular del Interior y Población, Áfrico Madrid, para que inicie los trámites, aunque no precisó la fecha en que otorgará el perdón a Bonilla.
Bonilla lleva casi 18 años en prisión y le restan cuatro y medio para cumplir una condena por la muerte de una persona y las heridas causadas a otras dos cuando salió en defensa de su padre, Pedro Bonilla, quien era víctima de una supuesta agresión, según una versión difundida el lunes por el diario local La Tribuna.
“Hasta este momento no se ha podido determinar que hayan existido actos dolosos encaminados a decir que (el incendio) se produjo como consecuencia de un acto criminal”, dijo Rubí a Canal 5.
Rubí detalló que la hipótesis del reo que quedó dormido mientras fumaba se basa en “numerosas declaraciones de los testigos”, aunque aclaró que “aún no precisamos cuál de los prisioneros (fue)”.
Esta versión, añadió, es respaldada por seis expertos del buró de Bebidas Alcohólicas, Armas de Fuego y Tabaco de Estados Unidos (ATF, por sus siglas en inglés) que investigan el caso y que en un informe preliminar dijeron que el siniestro del 14 de febrero se derivó de una flama proveniente de algún encendedor, cigarrillo, cerillo u otro y descartaron que la causa haya sido un rayo, un problema eléctrico o algún combustible o líquido inflamable.
Aun así, criticaron las medidas de seguridad en el sistema carcelario hondureño, donde se hacinan más de 13 mil reclusos.
“Este trágico suceso ha centrado la atención en las prácticas inadecuadas de seguridad en el sistema penitenciario hondureño, tales como la superpoblación, la presencia de materiales inflamables, la falta de personal en servicio y la falta de un plan de evacuación para los reclusos”, dijo el equipo en un comunicado.
Los más de 500 parientes de las víctimas han presionado al gobierno para aclarar la situación, ante las versiones de que el siniestro pudo ser provocado y de que los guardias del centro penal dispararon contra los reos. En este sentido, Rubí aseguró que ninguna de las más de 200 autopsias practicadas hasta ayer había revelado heridas de bala en las víctimas.
La cifra de muertos aumentó de 359 a 360 con el fallecimiento, ayer mismo, del reo Juan Angel Arias, de 66 años, informó a la AP el médico Manuel Boquín. “Hicimos esfuerzos por salvarlo, pero sólo le prolongamos la vida por unos días más ante las lesiones severas que presentaba”, añadió.
Indultarán a recluso
En tanto, el presidente Porfirio Lobo anunció que concederá el indulto al reo Marco Antonio Bonilla, de 50 años, porque salvó a varios de sus compañeros durante el voraz incendio.
El mandatario instruyó al titular del Interior y Población, Áfrico Madrid, para que inicie los trámites, aunque no precisó la fecha en que otorgará el perdón a Bonilla.
Bonilla lleva casi 18 años en prisión y le restan cuatro y medio para cumplir una condena por la muerte de una persona y las heridas causadas a otras dos cuando salió en defensa de su padre, Pedro Bonilla, quien era víctima de una supuesta agresión, según una versión difundida el lunes por el diario local La Tribuna.
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