EL PUEBLO Tokio.- China expandirá sus actividades navales en el Mar Meridional de China y en la región del Pacífico, lo que aumentará su “esfera de influencia”, según el informe anual de defensa de Japón, publicado hoy.
“Al tener en cuenta la modernización de las fuerzas naval y aérea de China en los últimos años su esfera de influencia es probable que aumente más allá de sus aguas”, indicó el documento.
“China tratará de seguir su expansión de actividades y convertir en rutinarias sus actividades navales en aguas cercanas a Japón, incluido el Mar del Este de China y el Océano Pacífico”, región donde Pekín mantiene varias disputas territoriales con naciones de la región, agregó la fuente.
El informe publicado por Japón, uno de los países que junto a Vietnam más desconfianza tiene en la expansión de China en la región, se publica apenas una semana después de que Beijing confirmara sus planes para poner en marcha su primer portaaviones en 2012.
El portavoz del ministerio de Defensa chino confirmó la semana pasada oficialmente que China está acondicionando el portaaviones Varyag, que compró a Ucrania en 1998.
Según algunos expertos, el gigante asiático –potencia militar regional en Asia- estaría igualmente construyendo otros dos portaaviones propios, lo que supondría un hito en el dominio chino de los océanos.
Ello es percibido con desconfianza por las disputas territoriales que China mantiene con varias naciones de la región en el Mar Meridional de China, en especial las islas Paracel y Spratleys, situadas en una localización estratégica en la ruta del petróleo de Oriente Medio a Asia.
Tokio también criticó en el documento hecho público este martes la falta de transparencia de los planes militares chinos, como por ejemplo en el presupuesto militar, que ha crecido anualmente a tasas cercanas a los dos dígitos durante los últimos años y que los expertos consideran muy superior a lo que oficialmente reconoce Beijing.
Asimismo, el ministerio de Defensa japonés alertó del aumento de las actividades de ciber espionaje en Asia, al tiempo que aseguró que los planes nucleares y balísticos de Corea del Norte suponen un grave peligro para su seguridad nacional.
“Al tener en cuenta la modernización de las fuerzas naval y aérea de China en los últimos años su esfera de influencia es probable que aumente más allá de sus aguas”, indicó el documento.
“China tratará de seguir su expansión de actividades y convertir en rutinarias sus actividades navales en aguas cercanas a Japón, incluido el Mar del Este de China y el Océano Pacífico”, región donde Pekín mantiene varias disputas territoriales con naciones de la región, agregó la fuente.
El informe publicado por Japón, uno de los países que junto a Vietnam más desconfianza tiene en la expansión de China en la región, se publica apenas una semana después de que Beijing confirmara sus planes para poner en marcha su primer portaaviones en 2012.
El portavoz del ministerio de Defensa chino confirmó la semana pasada oficialmente que China está acondicionando el portaaviones Varyag, que compró a Ucrania en 1998.
Según algunos expertos, el gigante asiático –potencia militar regional en Asia- estaría igualmente construyendo otros dos portaaviones propios, lo que supondría un hito en el dominio chino de los océanos.
Ello es percibido con desconfianza por las disputas territoriales que China mantiene con varias naciones de la región en el Mar Meridional de China, en especial las islas Paracel y Spratleys, situadas en una localización estratégica en la ruta del petróleo de Oriente Medio a Asia.
Tokio también criticó en el documento hecho público este martes la falta de transparencia de los planes militares chinos, como por ejemplo en el presupuesto militar, que ha crecido anualmente a tasas cercanas a los dos dígitos durante los últimos años y que los expertos consideran muy superior a lo que oficialmente reconoce Beijing.
Asimismo, el ministerio de Defensa japonés alertó del aumento de las actividades de ciber espionaje en Asia, al tiempo que aseguró que los planes nucleares y balísticos de Corea del Norte suponen un grave peligro para su seguridad nacional.
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