LIMA, Perú, dic. 1, 2009.- El gobierno del Perú declaró la emergencia sanitaria en la provincia del Datem del Marañón, en la región Loreto, donde la etnia amazónica de los kandozis sufre una epidemia de hepatitis B, informaron medios locales.
El ministro peruano de Salud, Óscar Ugarte, declaró a los periodistas que se establecerá un plan de salud para vacunar a todos los miembros de esa etnia amazónica, señaló el portal de internet del diario El Comercio.
Ugarte suscribirá mañana un acuerdo con el "apu" (jefe indígena) Venancio Ukuma, representante de los kandozis, y luego viajará a Loreto para coordinar la implementación de un programa de salud.
Los kandozis pidieron hoy que se declarara en emergencia la zona en que habitan, debido a que la hepatitis B afecta a un 68 por ciento de sus miembros.
"Pedimos que se declare en emergencia a la zona kandozi", dijo en una rueda de prensa en Lima el "apu" Ukuma.
El pedido fue secundado por el presidente del Comité de ciudadanos de lucha contra la hepatitis, Edson Aguilar, quien señaló que la declaración de emergencia debería extenderse a otras zonas porque la hepatitis B afecta a "otras comunidades nativas también, que ven mermada su población año a año".
Un estudio del Instituto Nacional de Salud, elaborado en base a un muestreo realizado en el año 2000, indicó que un 68 por ciento de los kandozis tenía hepatitis B y aunque no hay cifras oficiales, el infectólogo César Ramal, del hospital Regional de Loreto, considera que la enfermedad afecta al 80 por ciento de los indígenas.
El decano del Colegio Médico del Perú, Julio Castro, pidió también al gobierno que se actualizaran los datos sobre los kandozis portadores de la hepatitis B para planificar una estrategia que trate esta enfermedad.
Castro también pidió investigar cómo se han contagiado los indígenas, ya que ellos sostienen que la hepatitis B apareció cuando la petrolera Occidental Petroleum Company comenzó sus trabajos de exploración en la zona.
El ministro peruano de Salud, Óscar Ugarte, declaró a los periodistas que se establecerá un plan de salud para vacunar a todos los miembros de esa etnia amazónica, señaló el portal de internet del diario El Comercio.
Ugarte suscribirá mañana un acuerdo con el "apu" (jefe indígena) Venancio Ukuma, representante de los kandozis, y luego viajará a Loreto para coordinar la implementación de un programa de salud.
Los kandozis pidieron hoy que se declarara en emergencia la zona en que habitan, debido a que la hepatitis B afecta a un 68 por ciento de sus miembros.
"Pedimos que se declare en emergencia a la zona kandozi", dijo en una rueda de prensa en Lima el "apu" Ukuma.
El pedido fue secundado por el presidente del Comité de ciudadanos de lucha contra la hepatitis, Edson Aguilar, quien señaló que la declaración de emergencia debería extenderse a otras zonas porque la hepatitis B afecta a "otras comunidades nativas también, que ven mermada su población año a año".
Un estudio del Instituto Nacional de Salud, elaborado en base a un muestreo realizado en el año 2000, indicó que un 68 por ciento de los kandozis tenía hepatitis B y aunque no hay cifras oficiales, el infectólogo César Ramal, del hospital Regional de Loreto, considera que la enfermedad afecta al 80 por ciento de los indígenas.
El decano del Colegio Médico del Perú, Julio Castro, pidió también al gobierno que se actualizaran los datos sobre los kandozis portadores de la hepatitis B para planificar una estrategia que trate esta enfermedad.
Castro también pidió investigar cómo se han contagiado los indígenas, ya que ellos sostienen que la hepatitis B apareció cuando la petrolera Occidental Petroleum Company comenzó sus trabajos de exploración en la zona.
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