martes, 6 de abril de 2010

China ejecuta a un ciudadano nipón por tráfico de drogas

EFE
BEIJING, China, abr. 6, 2010.- La justicia china ejecutó hoy a un japonés por tráfico de drogas, lo que supone la primera pena capital aplicada a un ciudadano de Japón en China desde que ambos países normalizaron sus lazos diplomáticos en 1972.
Según un comunicado publicado por el Tribunal Supremo y recogido por la agencia oficial de noticias Xinhua, Mitsunobu Akano fue ajusticiado hoy en la provincia nororiental de Liaoning tras haberse despedido de su familia ayer en el centro de detención de Dalian, situado en la citada división administrativa.
Akano, de 65 años, fue condenado a muerte en junio del 2008 tras ser detenido en el año 2006 con 2.5 kilos de estupefacientes que pretendía llevar a Japón desde el aeropuerto de Dalian.
Según el comunicado, algunas de las drogas encontradas estaban en el equipaje de un cómplice, pero no da detalles sobre esta persona.
El ciudadano nipón apeló sin éxito la condena y el año pasado el Tribunal Supremo ratificó la pena máxima. El pasado 29 de marzo Beijing comunicó a Tokio la inminente ejecución.
La nota subraya que el tribunal tenía pruebas claras e irrefutables del tráfico de drogas, por lo que la pena de muerte fue dictada y llevada a cabo según la legislación china.
Aunque la prensa nipona señala que la ejecución de hoy podría tensar las siempre complicadas relaciones entre ambas potencias asiáticas, recuerda también que en julio del 2009 un chino fue ajusticiado en Japón por asesinar a tres compatriotas en Kawasaki en 1999.
La reacción hoy del Gobierno japonés al respecto de la noticia fue tibia: el primer ministro nipón, Yukio Hatoyama, la calificó de "lamentable" y se limitó a precisar que espera que no afecte a las relaciones bilaterales con Pekín.
Hatoyama, que previsiblemente viajará a China en junio para asistir al Día de Japón en la Expo de Shanghái 2010, pidió además "calma" a la población japonesa.
En parecidos términos se manifestó la portavoz de turno del Ministerio de Exteriores chino, Jiang Yu, quien afirmó en rueda de prensa que "otorgamos gran importancia a los lazos entre China y Japón, y no creo que este hecho afecte las relaciones normales entre los dos países".
Además, Jiang aseguró que se ha "informado a la parte japonesa de que las autoridades judiciales han seguido estrictamente la ley y han tomado la decisión garantizando los derechos legítimos de los implicados durante el proceso".
El pasado viernes el ministro japonés de Exteriores, Katsuya Okada, dijo que el Gobierno chino había informado al japonés de su intención de ejecutar a otros tres nipones también condenados a muerte por tráfico de drogas en China.
Los tres nipones son Teruo Takeda, Hironori Ukai y Katsuo Mori.
En referencia a estos condenados, China señaló hoy que "el tráfico de drogas está mundialmente reconocido como un delito grave y la ejecución de la pena de muerte sirve para prevenirlo y hacerle frente".
Muy pocos ciudadanos extranjeros han sido ejecutados en China en las últimas décadas, aunque se conoce al menos otro caso de un japonés, Ruichi Yamaguchi, que en 1951 fue fusilado junto con el italiano Antonio Riva por supuestamente intentar asesinar al entonces líder chino, Mao Zedong, y a otros altos cargos del régimen comunista chino.
Apenas hace tres meses, el británico de origen paquistaní Akmal Shaikh, de 53 años y con supuestos problemas mentales, fue ajusticiado por entrar en China con 4 kilos de heroína, lo que generó duras críticas por parte del Ejecutivo británico y de grupos de derechos humanos.
La semana pasada, Amnistía Internacional (AI) presentó un informe sobre la pena de muerte en el que criticaba especialmente a China por no revelar el número de personas que ejecuta anualmente.
En el 2008, AI documentó unas 1,700 ejecuciones, mientras que la Fundación Dui Hua eleva la cifra a más de 5 mil.
No obstante, el régimen comunista modificó en 2004 el sistema judicial chino obligando a que todas las penas de muerte fueran revisadas por el Tribunal Supremo (antes sólo bastaba con la confirmación de judicaturas locales), lo que ha conseguido un notable descenso.
Aunque no hay cifras oficiales publicadas porque ello se considera secreto de Estado, el descenso, según diversas fuentes, puede estar entre el 20 y el 50 por ciento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario