BEIJING, China, mayo 8, 2010.- El temporal que azota el sur de China desde el pasado miércoles ya ha causado 65 muertos, mientras que 14 se encuentran desaparecidos y más de dos millones se han visto afectadas, informó hoy la agencia oficial de noticias Xinhua.
Según la Oficina de Control de Inundaciones y Sequía, las lluvias que caen desde el miércoles en las provincias de Sichuan, Guizhou, Jiangxi, Guangdong y Hunan, al suroeste y sur de China, y en la municipalidad suroccidental de Chongqing han afectado a 2,550,000 personas y 100 mil hectáreas de tierras de cultivo, además de derruir 9,900 casas.
Las tormentas han provocado inundaciones, avalanchas de tierra y rocas, la crecida de los ríos, el estallido de diques, daños en carreteras, puentes, instalaciones de energía y telecomunicaciones.
Tan sólo en la municipalidad de Chongqing, que también se vio afectada por un tornado, han muerto 31 personas y otra permanece desaparecida y 85 mil han tenido que ser reubicadas. Además, unas 8 mil casas han sido derruidas y unas 60 mil han sufrido daños, anunciaron las autoridades locales.
El Gobierno central ya ha enviado a esta municipalidad una ayuda económica de 31 millones de yuanes (4.54 millones de dólares, 3.56 millones de euros), así como equipos de socorro al resto de provincias afectadas.
En la provincia de Hunan, donde han fallecido 10 personas y otra aún está desaparecida, cerca de 5 mil embalses se han visto amenazados por el aumento del agua.
Las autoridades meteorológicas locales han previsto fuertes precipitaciones para los próximos días en esta provincia, así como en Jiangxi.
El ministro chino de Recursos Hidraúlicos, Chen Li, advirtió ayer que los más de 30 mil embalses de China cuya estructura es "frágil" corren peligro de sufrir daños y causas desastres naturales durante la presente temporada de lluvias, que se prevé más copiosa que en años anteriores.
El país asiático, especialmente su mitad sur, sufre cada año numerosos desastres naturales como inundaciones y tifones durante su temporada de lluvias, que suele iniciarse en mayo y finalizar en septiembre u octubre, y por el que cientos de personas mueren anualmente.
Según la Oficina de Control de Inundaciones y Sequía, las lluvias que caen desde el miércoles en las provincias de Sichuan, Guizhou, Jiangxi, Guangdong y Hunan, al suroeste y sur de China, y en la municipalidad suroccidental de Chongqing han afectado a 2,550,000 personas y 100 mil hectáreas de tierras de cultivo, además de derruir 9,900 casas.
Las tormentas han provocado inundaciones, avalanchas de tierra y rocas, la crecida de los ríos, el estallido de diques, daños en carreteras, puentes, instalaciones de energía y telecomunicaciones.
Tan sólo en la municipalidad de Chongqing, que también se vio afectada por un tornado, han muerto 31 personas y otra permanece desaparecida y 85 mil han tenido que ser reubicadas. Además, unas 8 mil casas han sido derruidas y unas 60 mil han sufrido daños, anunciaron las autoridades locales.
El Gobierno central ya ha enviado a esta municipalidad una ayuda económica de 31 millones de yuanes (4.54 millones de dólares, 3.56 millones de euros), así como equipos de socorro al resto de provincias afectadas.
En la provincia de Hunan, donde han fallecido 10 personas y otra aún está desaparecida, cerca de 5 mil embalses se han visto amenazados por el aumento del agua.
Las autoridades meteorológicas locales han previsto fuertes precipitaciones para los próximos días en esta provincia, así como en Jiangxi.
El ministro chino de Recursos Hidraúlicos, Chen Li, advirtió ayer que los más de 30 mil embalses de China cuya estructura es "frágil" corren peligro de sufrir daños y causas desastres naturales durante la presente temporada de lluvias, que se prevé más copiosa que en años anteriores.
El país asiático, especialmente su mitad sur, sufre cada año numerosos desastres naturales como inundaciones y tifones durante su temporada de lluvias, que suele iniciarse en mayo y finalizar en septiembre u octubre, y por el que cientos de personas mueren anualmente.
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