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CIUDAD DEL VATICANO, abr. 24, 2009.- La Universidad Lateranense de Roma presentó este viernes la edición de un escrito inédito de Juan Pablo II sobre el amor conyugal descubierto por casualidad hace algunos meses en Polonia.
Bajo el título "Regla para el grupo de las parejas de esposos Humanae vitae", el texto fue escrito por Karol Wojtyla en 1968 para ayudar a los matrimonios a aplicar la encíclica papal sobre la vida humana publicada ese año.
En aquel entonces el arzobispo de Cracovia redactó el documento como resultado de su amistad con las parejas que formaban parte del grupo Srodowisko ("El ambiente", en polaco) correspondiente a la pastoral familiar.
La regla permaneció en el anonimato por años hasta que fue descubierta por el sacerdote Przemyslaw Kwiatkowski en los archivos religiosos de Cracovia quien decidió ocuparse de ella en su tesis de doctorado en el Pontificio Instituto Juan Pablo II.
En el documento, Karol Wojtyla explicó que la misma fue resultado de una serie de experiencias pastorales con algunas parejas de esposos y, al mismo tiempo, sobre la base de la experiencia matrimonial de los esposos mismos.
"Se dirige a las parejas matrimoniales en su integridad y no a los cónyuges de manera individual. Es importante, de hecho, que ésta sea adoptada y practicada por las parejas de esposos y no de los maridos o de las esposas, sin el compromiso de sus respectivos cónyuges", apuntó.
El texto pretende orientar a una serie de grupos de varios matrimonios católicos en un compromiso continuo espiritual para cumplir en la familia el mensaje de Cristo "con plena comprensión y con pleno amor".
"Se trata, por tanto, de formar una adecuada espiritualidad, es decir, una vida interior, que permita configurar la vida conyugal y familiar de modo cristiano", estableció.
"Tal espiritualidad no puede existir en una forma definitiva sobre el modelo de las congregaciones religiosas, sino que debe ser constantemente reelaborada", añadió.
Bajo el título "Regla para el grupo de las parejas de esposos Humanae vitae", el texto fue escrito por Karol Wojtyla en 1968 para ayudar a los matrimonios a aplicar la encíclica papal sobre la vida humana publicada ese año.
En aquel entonces el arzobispo de Cracovia redactó el documento como resultado de su amistad con las parejas que formaban parte del grupo Srodowisko ("El ambiente", en polaco) correspondiente a la pastoral familiar.
La regla permaneció en el anonimato por años hasta que fue descubierta por el sacerdote Przemyslaw Kwiatkowski en los archivos religiosos de Cracovia quien decidió ocuparse de ella en su tesis de doctorado en el Pontificio Instituto Juan Pablo II.
En el documento, Karol Wojtyla explicó que la misma fue resultado de una serie de experiencias pastorales con algunas parejas de esposos y, al mismo tiempo, sobre la base de la experiencia matrimonial de los esposos mismos.
"Se dirige a las parejas matrimoniales en su integridad y no a los cónyuges de manera individual. Es importante, de hecho, que ésta sea adoptada y practicada por las parejas de esposos y no de los maridos o de las esposas, sin el compromiso de sus respectivos cónyuges", apuntó.
El texto pretende orientar a una serie de grupos de varios matrimonios católicos en un compromiso continuo espiritual para cumplir en la familia el mensaje de Cristo "con plena comprensión y con pleno amor".
"Se trata, por tanto, de formar una adecuada espiritualidad, es decir, una vida interior, que permita configurar la vida conyugal y familiar de modo cristiano", estableció.
"Tal espiritualidad no puede existir en una forma definitiva sobre el modelo de las congregaciones religiosas, sino que debe ser constantemente reelaborada", añadió.
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