Destaca Obama la herencia cultural y las contribuciones de los mexicanos al crecimiento de EU
WASHINGTON, Estados Unidos.- El presidente estadounidense, Barack Obama, celebró este jueves la festividad mexicana del Cinco de Mayo con una jocosidad que le permitió un chiste sobre el gusto de su esposa, Michelle, por los tamales de México.
El Cinco de Mayo es una festividad mexicana que conmemora la Batalla de Puebla de 1862, en la que los soldados mexicanos, superados en armas y número por sus enemigos, vencieron a las tropas invasoras de Francia.
La fecha ha sido conmemorada durante muchos años en el Capitolio y en la Casa Blanca en reconocimiento de la creciente comunidad mexicana en Estados Unidos.
No había mariachis en el Salón Este de la Casa Blanca, pero el mandatario estadounidense, vitoreado por los cerca de 200 invitados, recurrió al humor para destacar la herencia cultural y las contribuciones de los mexicanos al crecimiento de Estados Unidos.
Obama reveló que a la primera dama le gustan los tamales mexicanos.
"No quieres ponerte en medio de Michelle y un tamal, eso es cierto. Pero ella se mueve, así es que puede darse el lujo de comer cuantos tamales quiera", bromeó Obama, arrancando risas y aplausos de los invitados.
Obama señaló que la celebración anual del Cinco de Mayo sirve para "conmemorar" la "herencia compartida entre mexicanos y estadounidenses".
"Es un día para recordar que Estados Unidos es un sitio más rico, más fuerte y más dinámico gracias a las contribuciones de los mexicanoestadounidenses a la vida nacional", enfatizó Obama.
Los latinos conforman el 16 % de la población en Estados Unidos y los mexicanos siguen siendo el bloque más grande de esa comunidad, según datos del Censo.
La ceremonia, amenizada con música grabada de artistas como la mexicano-estadounidense Selena y los mexicanos Carlos Santana y Los Bukis, contó con la asistencia del embajador de México en Estados Unidos, Arturo Sarukhan; líderes demócratas del Congreso, miembros latinos del Gabinete presidencial y miembros de la comisión que hoy recomendó la construcción del primer museo latino nacional.
En el acto, Obama también pidió la ayuda de la comunidad latina para conseguir la aprobación del "Dream Act", que permitiría la legalización de estudiantes indocumentados que se inscriban en las Fuerzas Armadas o completen al menos dos años de educación universitaria.
El "Dream Act" fue aprobado en la Cámara de Representantes en diciembre pasado pero no obtuvo los 60 votos necesarios para avanzar en el Senado.
La Casa Blanca ha dicho que, tal como lo ha venido haciendo últimamente, Obama continuará insistiendo en las próximas semanas en una solución bipartidista al problema de la inmigración ilegal en Estados Unidos.
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