lunes, 11 de mayo de 2009

Benedicto XVI celebra misa en Medio Oriente


AP
AMMAN, Jordania, mayo 10, 2009.- El papa Benedicto XVI llamó el domingo a los cristianos en el Oriente Medio a que perseveren en su fe pese a las penurias que amenazan sus comunidades ancestrales, al celebrar en Ammán ante 20.000 personas la primera misa al aire libre de su peregrinaje por Tierra Santa.
En el estadio jordano el Papa fue saludado en árabe por el patriarca de Jerusalén, el arzobispo Fuad Twal, quien recordó que desde el inicio de la guerra, Jordania ha aceptado a más de un millón de refugiados iraquíes, de los cuales unos 40.000 son cristianos. De acuerdo con cifras del Vaticano, los cristianos son menos de 2% de la población jordana, que es abrumadoramente musulmana.
"La comunidad católica aquí está profundamente conmovida por las dificultades y la incertidumbre que afecta a la población en el Medio Oriente", dijo Benedicto XVI hablando en inglés durante la misa.
"Nunca deben olvidar la gran dignidad que surge de su herencia cristiana, tampoco deben dejar de sentir la solidaridad amorosa de todos sus hermanos y hermanas en la iglesia alrededor del mundo", agregó.
En la misa se vieron banderas de Líbano, Siria, Irak y Egipto, entre otros países. Los asistentes aplaudían a las palabras del Papa y gritaban su nombre.
"El Santo Padre habla y su voz es escuchada en el Medio Oriente, especialmente por los iraquíes cristianos, que sufren mucho", dijo el padre Raymond Mousalli de Irak.
Mousalli dijo que los iraquíes de todas las religiones deben permanecer unidos y encontrar la paz en los años de guerra. Se calcula que hay unos 20.000 iraquíes cristianos en Jordania.
La misa se efectuó en el tercer día de la visita de Benedicto XVI en Jordania. El lunes el Papa acudirá a Israel y los territorios palestinos como parte de la gira en la que espera fortalecer sus relaciones, a veces tensas, con los musulmanes y judíos.
Benedicto XVI también espera animar a sus fieles en el Medio Oriente, que en muchos casos se han visto obligados a abandonar sus países o la región por las guerras y las dificultades económicas que amenazan extinguir las antiguas comunidades de cristianos en la zona.
Benedicto XVI enfureció a muchos en el mundo musulmán hace tres años cuando citó un texto medieval que caracterizó algunas de las enseñanzas del profeta Mahoma como "malvadas e inhumanas", particularmente "su comando de diseminar la fe con la espada".
Cuando llegó a Jordania el sábado, el Papa expresó su "profundo respeto" por el islam y dijo que esperaba que la iglesia católica fuese una fuerza de paz.

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