EL UNIVERSAL
EL CAIRO/DAMASCO (DPA).— Miembros del aparato de seguridad estatal sirio dispararon ayer contra opositores al presidente Bashar al-Assad y mataron a unos 15 manifestantes, según fuentes opositoras.
Los disturbios comenzaron cuando más de 100 mil empleados públicos y miembros del partido gubernamental Baath se manifestaron a favor del régimen del presidente sirio en el centro de Damasco y otras partes del país, tras el discurso del lunes en el que el mandatario prometió reformas y un diálogo nacional. Los participantes portaban banderas y fotos del dirigente.
Al-Assad decidió ampliar la amnistía anunciada a finales de mayo para los presos políticos, informó la agencia de noticias estatal Sana, lo que fue recibido con desconfianza por la oposición. Según la noticia, la amnistía, que en algunos casos supone la libertad y en otros la reducción de la pena, será válida para actos cometidos antes del 21 de junio. Hasta ayer se desconocía cuántos presos se beneficiaron del primer perdón.
Numerosas personas recibieron ayer por la mañana mensajes SMS convocándolos a la manifestación a favor de Al-Assad, con lemas como “Que el mundo oiga nuestra voz”.
Sin embargo, los manifestantes antigubernamentales salieron también a las calles rechazando las promesas del mandatario y pidiendo la caída del régimen. En la norteña ciudad de Homs se enfrentaron partidarios de Al-Assad y opositores. Seguidores de las milicias Shabiha, leales al gobierno, dispararon contra los opositores, informaron activistas. Según el canal de noticias Al-Arabiya murieron 11 personas.
Asimismo hubo nuevas protestas contra el régimen en el noreste kurdo.
En la localidad de Al Mayadien, que pertenece a la provincia Deir al Zor, perdieron la vida cuatro manifestantes cuando el servicio secreto militar disparó contra los opositores.
Los activistas señalaron que los tanques y vehículos militares entraron en la ciudad de Hama y 200 soldados fueron desplegados en la plaza de Al Assi, en un intento de frenar las protestas contra el régimen.
Entretanto, el ejército sirio continúa sus razias contra opositores en la zona fronteriza con Turquía. De acuerdo con las organizaciones de derechos humanos sirias, desde mediados de marzo han muerto mil 310 civiles y 341 miembros de las fuerzas de seguridad.
En Damasco y Alepo ha habido pequeñas concentraciones, mientras que los centros de la oposición son Deraa, Idlib, Homs, Hama y Deir al Sor. La Cruz Roja y la Media Luna Roja tendrán de nuevo acceso a las partes de Siria afectadas por las protestas contra el gobierno y la violencia de los últimos meses, informaron ambos grupos.
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