EFE
ZAMBOANGA, Filipinas, mar. 17, 2009.- Al menos dos personas murieron y tres mas resultaron heridas al explotar una granada en un bar de karaoke de la convulsa región sur de Filipinas, informaron fuentes policiales.
El ataque ocurrió cerca del puerto de la isla de Joló, mil kilómetros al sur de la capital, donde un desconocido lanzó el explosivo contra el establecimiento antes de huir a toda prisa del lugar, según el jefe de la Policía provincial, superintendente Julasirim Kasim.
Las fuerzas de seguridad no descartan una venganza personal pero creen que el ataque fue llevado a cabo por la organización extremista Abu Sayyaf para desviar la atención debido al asedio que sufren en las últimas horas por parte de los militares filipinos.
Un francotirador del Ejército hirió ayer a Albader Parad, jefe del grupo de rebeldes que mantiene secuestrados a tres cooperantes de la Cruz Roja Internacional, entre ellos dos extranjeros.
Los tres, un italiano, un suizo y una filipina- fueron raptados el pasado 15 de enero y sus captores exigen para liberarles la retirada de las tropas gubernamentales del sur del archipiélago.
Fundado en 1991 por ex combatientes de la guerra de Afganistán contra la Unión Soviética, Abu Sayyaf está vinculado a la Yemaa Islamiya, el brazo de Al Qaeda en el Sudeste Asiático.
Es considerado un grupo terrorista por los gobiernos de Filipinas y Estados Unidos y se le atribuyen los atentados más sangrientos de los últimos años en el archipiélago.
El ataque ocurrió cerca del puerto de la isla de Joló, mil kilómetros al sur de la capital, donde un desconocido lanzó el explosivo contra el establecimiento antes de huir a toda prisa del lugar, según el jefe de la Policía provincial, superintendente Julasirim Kasim.
Las fuerzas de seguridad no descartan una venganza personal pero creen que el ataque fue llevado a cabo por la organización extremista Abu Sayyaf para desviar la atención debido al asedio que sufren en las últimas horas por parte de los militares filipinos.
Un francotirador del Ejército hirió ayer a Albader Parad, jefe del grupo de rebeldes que mantiene secuestrados a tres cooperantes de la Cruz Roja Internacional, entre ellos dos extranjeros.
Los tres, un italiano, un suizo y una filipina- fueron raptados el pasado 15 de enero y sus captores exigen para liberarles la retirada de las tropas gubernamentales del sur del archipiélago.
Fundado en 1991 por ex combatientes de la guerra de Afganistán contra la Unión Soviética, Abu Sayyaf está vinculado a la Yemaa Islamiya, el brazo de Al Qaeda en el Sudeste Asiático.
Es considerado un grupo terrorista por los gobiernos de Filipinas y Estados Unidos y se le atribuyen los atentados más sangrientos de los últimos años en el archipiélago.
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