La Habana.— El ex presidente cubano Fidel Castro se mostró satisfecho con la marcha del país en estos cuatro años en que estuvo lejos del ejecutivo y delegó el poder en su hermano Raúl Castro.
"El país está marchando a pesar de todos los desafíos", dijo durante un encuentro con estudiantes el miércoles pero transmitido el jueves por la televisión cubana.
Castro, de 84 años, abandonó su cargo en 2006 cuando una enfermedad lo puso al borde de la muerte y desapareció de los escenarios públicos hasta mediados de este año, en que comenzó a sostener reuniones con diferentes sectores del país pero pocas veces habla de la realidad de la isla.
Desde el inicio de su gestión su hermano llevó adelante moderadas reformas en el campo económico, como la suspensión de restricciones a la compra de teléfonos celulares o electrodomésticos. Pero a mediados de este año, y bajo la presión de una crisis financiera, anunció que realizará una verdadera "actualización" del modelo cubano, caracterizado por su fuerte estatismo.
Entre las medidas a las que Raúl Castro ya dio luz verde está el cierre de medio millón de puestos laborales del sector estatal de forma paulatina hasta el primer trimestre del 2011 y la apertura al cuentapropismo o trabajo independiente.
Castro no quiso profundizar en la respuesta a un joven que lo indagó sobre su apreciación a un documento del Partido Comunista de Cuba (PCC) circulado esta semana como parte de la convocatoria al VI Congreso de la organización y que hace énfasis en esta "actualización" del modelo socialista de la isla.
"Me enfermé e hice lo que debía hacer: delegué mis atribuciones. No puedo hacer algo que no estoy en condiciones de dedicarle todo el tiempo. Si yo mismo no sabía si iba a salir de aquello", expresó el ex gobernante". No vacilé ni un segundo al deponer mis cargos", agregó Castro, quien en las elecciones de 2008 renunció a su candidatura presidencial y abrió el paso como mandatario formal --no interino, como venía desempeñándose-- a Raúl Castro.
Castro aclaró al muchacho que no estaba en ese encuentro con ellos en su carácter de dirigente partidario.
El ex gobernante mantiene su cargo como primer secretario del Partido Comunista de Cuba (PCC), el único legal en la isla y que según la Constitución rige los destinos del país.
La semana pasada Raúl Castro --el segundo secretario-- informó que el VI Congreso del PCC se realizará en la segunda quincena de abril pero sólo se tratarán temas económicos.
El evento es la máxima instancia de decisión partidaria y no está claro si el barbado líder seguirá o no con la primera magistratura de la organización luego de que este se desarrolle.
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