DIARIO.COMLos Angeles— Los conductores tocaron las bocinas de sus autos y saludaron con las manos desde sus automóviles al reabrirse ayer un largo tramo de unas de las autopistas más transitadas de Estados Unidos, gracias a que obras de construcción terminaron 16 horas antes de lo planeado.
El tránsito comenzó a moverse en la autopista 405 poco después de mediodía por primera vez desde que se cerró el tramo de 16 kilómetros (10 millas) el viernes a la medianoche para permitir la demolición parcial de un puente.
No hubo mayores problemas desde que se cerró la carretera, a pesar de advertencias de un “carmageddon”, una expresión en inglés que equivale a “apocalipsis vehicular”.
En una conferencia de prensa ofrecida ayer por la mañana, el alcalde de Los Angeles Antonio Villaraigosa anunció que los obreros empezarían a reabrir la autopista a las 11:30 a.m. y que se esperaba que se abriera completamente por la tarde.
El alcalde elogió a los contratistas por trabajar de manera rápida y agradeció a los habitantes de la ciudad por hacer caso a las llamadas de evitar las carreteras. El alcalde también reconoció a los medios de comunicación por difundir información sobre el cierre, que originalmente se había planeado por 53 horas.
“No hubiéramos podido hacer esto sin la cooperación de la ciudad”, dijo Villaraigosa.
Los obreros terminaron los trabajos de demolición del puente a las 7:00 de la mañana, luego de derrumbar dos grandes pilares.
Desde hace semanas, las autoridades habían advertido a la población que conducir el fin de semana como suelen hacerlo entre semana podría desatar el “carmageddon”, un embotellamiento gigantesco desde la autopista 405 hasta otras calles y carreteras.
Sin embargo, los temores desa-parecieron al verse menos vehículos en las carreteras.
“Fue bien agradable. De hecho, demoré menos tiempo de lo normal en llegar al trabajo”, dijo Jenn Tanaguchi, una peluquera. “La gente me decía que iba a tener que salir dos horas más temprano y que todo estaría bloqueado. Pero no hubo problemas”.
En 11 meses, se tendrá que demoler el lado norte del puente, que está siendo demolido para permitir la construcción de otro carril en la autopista. Las autoridades expresaron optimismo que el futuro cierre será tan tranquilo como éste.
El tránsito comenzó a moverse en la autopista 405 poco después de mediodía por primera vez desde que se cerró el tramo de 16 kilómetros (10 millas) el viernes a la medianoche para permitir la demolición parcial de un puente.
No hubo mayores problemas desde que se cerró la carretera, a pesar de advertencias de un “carmageddon”, una expresión en inglés que equivale a “apocalipsis vehicular”.
En una conferencia de prensa ofrecida ayer por la mañana, el alcalde de Los Angeles Antonio Villaraigosa anunció que los obreros empezarían a reabrir la autopista a las 11:30 a.m. y que se esperaba que se abriera completamente por la tarde.
El alcalde elogió a los contratistas por trabajar de manera rápida y agradeció a los habitantes de la ciudad por hacer caso a las llamadas de evitar las carreteras. El alcalde también reconoció a los medios de comunicación por difundir información sobre el cierre, que originalmente se había planeado por 53 horas.
“No hubiéramos podido hacer esto sin la cooperación de la ciudad”, dijo Villaraigosa.
Los obreros terminaron los trabajos de demolición del puente a las 7:00 de la mañana, luego de derrumbar dos grandes pilares.
Desde hace semanas, las autoridades habían advertido a la población que conducir el fin de semana como suelen hacerlo entre semana podría desatar el “carmageddon”, un embotellamiento gigantesco desde la autopista 405 hasta otras calles y carreteras.
Sin embargo, los temores desa-parecieron al verse menos vehículos en las carreteras.
“Fue bien agradable. De hecho, demoré menos tiempo de lo normal en llegar al trabajo”, dijo Jenn Tanaguchi, una peluquera. “La gente me decía que iba a tener que salir dos horas más temprano y que todo estaría bloqueado. Pero no hubo problemas”.
En 11 meses, se tendrá que demoler el lado norte del puente, que está siendo demolido para permitir la construcción de otro carril en la autopista. Las autoridades expresaron optimismo que el futuro cierre será tan tranquilo como éste.
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